NUESTRO FUNDADOR JOSÉ MARIA PUJADAS FERRER
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmxCnIue_cfAJ6m_H2NQwLBoFmYUs72rkqdp35L8-sDPoi-lUIk9v42JLCOQ_eMlpnkEjIcm4D2XIdBtetpGi6vPPavv6JnZGOY-azcZ9ecwhEvq09ZMcr-bpUJbj1Wad4eddrerPySqBu/s200/PUJADAS.jpg)
El Padre Pujadas ejerció como vicario en Lers (Gerona) hasta
el 29 de Julio de 1941. El 20 de Abril de 1944 fue nombrado cura párroco de
Vila Bertran donde promovió y comenzó la restauración de su Iglesia.
Sin dejar sus responsabilidades, fue nombrado asesor de la
acción católica en Figueras, además de servir de capellán de las Madres
Escolapias y ejercer como profesor en el instituto de la ciudad, actividad que
prosiguió hasta su ingreso en la Casa Misión de Banolas, en 1956. Inicio los
Cursillos de Cristiandad en la Diócesis de Gerona y los llevo a Paris. Fue
precisamente esta actividad en Cursillos la que hizo que por primero vez
viajara a Colombia. Siguiendo los consejos de Pablo VI y acorde con la opción
prioritaria por la juventud de los Obispos Latinoamericanos reunidos en
Medellín, y en colaboración con otros sacerdotes y laicos, en 1968 comenzó en
Colombia el Movimiento de Encuentros de Promoción Juvenil. El Movimiento se
extendió por Centroamérica, por lo que el P. Pujadas permaneció largas
temporadas en Costa Rica, Guatemala, El Salvador, Honduras, y Nicaragua entre
otros. En Costa Rica, el P. Pujadas trabajo como director arquidiócesano de
pastoral orgánica de juventud y Encuentros de Promoción Juvenil de la
arquidiócesis de San José hasta que en 1972 viajo y permaneció dos años en los
Ángeles (Estados Unidos), dedicándose a los Encuentros y Cursillos.
En 1974, el P. Pujadas regreso a Barcelona reclamado por su
Obispo, el Cardenal Narcis Jubany, donde inicio y dirigió los Encuentros de
Promoción Juvenil, alternando esta actividad con la coordinación y dirección a
nivel internacional del Movimiento, que llevo a otras naciones tales como
Alemania, Venezuela, e Italia.
El 22 de Septiembre de 1984, pocos días después de su
regreso del V Encuentro Internacional de los Encuentros de Promoción Juvenil,
celebro en Lima, Perú, sufrió un grave quebranto de salud. Su ánimo no recae,
su conciencia de “ser un grano de trigo” y su experiencia del “gran don de la
amistad” le hacen concebir nuevos proyectos e ilusiones. El segundo domingo de
Adviento, 9 de Diciembre de 1984, a las dos y cuarto de la tarde, el Padre José
María Pujadas nos dejó su ánimo, su ilusión y su espíritu.